Como es tradición, el Ford Field de Detroit, Michigan, es una parada obligatoria en la función que prepara la liga de fútbol americano profesional de los Estados Unidos durante el Día de Acción de Gracias. También como es tradición, el equipo local está lejos de ser uno de los protagonistas de la temporada y jugará este partido buscando su primera victoria de la campaña ante Chicago.

El equipo visitante tampoco llega en un buen momento, pues acumula cinco derrotas en fila y posee el segundo peor récord (3-7) de la Conferencia Nacional junto con Seattle, por delante únicamente de su próximo rival, Detroit (0-9-1). Es así que el primer duelo de la jornada estelar para este jueves no tendrá consecuencias de postemporada, pero sí puede significar un envión anímico para cualquier conjunto que se alce con la victoria.

La buena noticia para Chicago es que ya saben lo que es derrotar a Detroit en la actual campaña, pues los vencieron en el Soldier Field al comienzo de octubre con una actuación estelar de los corredores David Montgomery y Damien Williams. Otra buena noticia para la visita es que Jared Goff, mariscal de campo titular del local, muy posiblemente se perderá el juego por una lesión y será Tim Boyle quien esté en los controles para este choque.

El joven quarterback de Chicago, Justin Fields, ha ido mostrando mejorías en las últimas semanas en las que ha sido titular por encima de Andy Dalton, pero tuvo que abandonar el partido contra Baltimore por una lesión en las costillas y es posible que se lo pierda también, así que hay que estar al tanto de las actualizaciones para saber si alguna de estas figuras podrá o no jugar este jueves.

Hablando de apuestas, el cuadro visitante es favorito por 3.5 unidades por un momio de -106, aunque sin tener claridad sobre quién sí estará disponible es difícil realizar algún pronóstico más allá del triunfo de Chicago por cualquier diferencia de puntos, con momio de -175, pues Andy Dalton es mejor suplente que Tim Boyle y los de Illinois tienen un mejor equipo en todas las fases que los de Michigan.

Las altas en este juego están designadas en 42 unidades, cifra que difícilmente conseguirán estos conjuntos porque posiblemente no contarán con dos armas ofensivas claves en sus mariscales de campo y porque son de los equipos con menor promedio de puntos por partido con 16.7 ambos, así que conviene considerar las bajas, con momio de -110.