El 21 de mayo de 2025, el Estadio San Mamés de Bilbao será testigo de una final vibrante de la Europa League entre Tottenham y Manchester United, dos gigantes ingleses que buscan salvar una temporada decepcionante.

Ambos clubes, ubicados en la parte baja de la Premier League (17º y 16º respectivamente), ven en este duelo la oportunidad de alzar un trofeo y asegurar un boleto a la Champions League 2025/26.

Tottenham, dirigido por Ange Postecoglou, llega tras superar al Bodø/Glimt con un contundente 5-1 global en semifinales. Sin embargo, las lesiones de James Maddison, Dejan Kulusevski y Lucas Bergvall merman su creatividad en el mediocampo. A pesar de ello, la solidez de Dominic Solanke y el regreso de Son Heung-min impulsan sus esperanzas. Los Spurs no ganan un título desde 2008 y buscan su primera Europa League.

Manchester United, bajo el mando de Rúben Amorim, aplastó al Athletic Club 7-1 en semifinales, mostrando un ataque letal con Mason Mount y Rasmus Højlund. Los Red Devils, campeones en 2016/17, tienen un historial europeo más robusto, con seis títulos continentales. Sin embargo, su irregularidad doméstica y una defensa que ha concedido 54 goles en la Premier son puntos débiles.

Los antecedentes recientes favorecen a los londinenses, que vencieron a los Red Devils en sus tres encuentros esta temporada: 3-0 y 1-0 en la Premier y 4-3 en la League Cup.

Mi recomendación para apostar en este encuentro será tomar la opción de la victoria del Manchester United que se paga con momio de +150 en los Books de Caliente, pues pesará la experiencia y que han enfrentado a equipos más complicados en su camino a la Final.