Michigan y Ohio State presumen una de las rivalidades más laureadas en el futbol americano colegial y seguramente compite por la N°1 en Estados Unidos, pero, por si eso no fuera poco, la edición 2022 de este partido en la NCAA promete ser el enfrentamiento más relevante al menos desde 2006, para que empecemos a entender lo que veremos este sábado en el Ohio Stadium.
Jim Harbaugh por fin se pudo sacudir el dominio que Ryan Day y los Buckeyes tenían sobre él con un sólido y convincente triunfo por 42-27 ante sus aficionados y ahora tiene el hambre de demostrar que no fue cuestión de suerte y, en caso de salir avantes, estarán asegurando un lugar en los playoffs del futbol americano colegial, poniendo en entredicho el boleto al principal rival del programa.
Tanto Michigan como Ohio State llegan con la etiqueta de invicto, la conferencia del Big Ten parece destinada a quien resulte ganador en este juego y, con suerte, pueden saltar al N°1 de la nación en caso que Georgia sea sorprendido ya que los Buckeyes actualmente ostentan el N°2 del país y, salvo su juego inaugural contra Notre Dame (21-10) y posteriormente ante Northwestern (21-7), al resto de sus rivales los han superado a placer.
Por su parte, los Wolverines de Jim Harbaugh (N°3 en la NCAA) también han tenido una temporada relativamente tranquila, pero Illinois el pasado fin de semana les hizo ver su suerte y estuvieron cerca de entorpecer los planes para este gran compromiso en Ohio.
La mala noticia para Michigan es que uno de sus jugadores más importantes en la temporada, el corredor Blake Corum, salió lesionado del juego de la semana pasada y es parte fundamental para los Wolverines, pero aún se desconoce si podrá estar ante Ohio State, quien cuenta con uno de los jugadores más dominantes del futbol americano colegial y está proyectado como una de las primeras selecciones en el draft de la NFL del 2024 porque aún le queda al menos un año más de elegibilidad.
La participación, o no, de Blake Corum puede inclinar la balanza o darle una mayor oportunidad a Michigan de lograr triunfos consecutivos ante los Buckeyes, pero la realidad es que la mesa parece servida para que Ohio State (-8) cubra la línea y se quede con el choque por su sed de revancha.