Green Bay y Detroit tienen idéntica marca de dos triunfos y un descalabro --con un rival en común hasta el momento-- y serán los encargados de abrir las hostilidades de la Semana 4 en la NFL con el partido de jueves por la noche en Lambeau Field con la motivación de saber que, el equipo que resulte victorioso estará presumiendo la cima del Norte de la Conferencia Nacional, para sorpresa de muchos.
Estos longevos rivales llegan con grandes sensaciones a la cita en Wisconsin toda vez que los ‘cabeza de queso’, en su debut en casa, se repusieron de una desventaja de 17 puntos en el último cuarto para vencer 18-17 a New Orleans con una soberbia labor de su defensiva y también con una actuación que llena de confianza a su “nuevo” mariscal de campo, Jordan Love.
Por otra parte, Detroit volvió a la senda del triunfo con una victoria convincente ante Atlanta, conjunto que una semana antes precisamente había vencido a Green Bay, pero los comandados por Dan Campbell, pese a aparecer como visitantes, deben partir como favoritos por lo que se ha visto hasta el momento, principalmente si su defensiva es capaz de presionar a Love como lo hicieron con Desmond Ridder el domingo pasado.
A su vez, la franquicia que está en manos de Matt LaFleur depende en gran medida de la disponibilidad de algunos jugadores ya que el corredor Aaron Jones y el esquinero Jaire Alexander se perfilan a tener actividad de nueva cuenta, pero dos hombres claves en su línea ofensiva, David Baktiari y Elgton Jenkins, tienen una oportunidad más remota de volver a equiparse y eso es precisamente lo que debe aprovechar Detroit para manejar el destino del Norte de la Conferencia Nacional.
Green Bay (+1.5) quizá esté excediendo expectativas, pero eso no les alcanza para partir como favoritos para el partido del jueves por la noche y enfrentarán a su rival más complicado en lo que va de la campaña así que, por más que jueguen en casa y se trate de un partido divisional, Detroit sacará la victoria cubriendo la línea en un juego de bajas (45.5).