Kansas City (9-5) parece estar lejos --al menos en las últimas semanas-- de los contendientes en la Conferencia Americana, pero su ventaja y diferencia en la División Oeste los tiene a un paso de meterse a los playoffs como campeones divisionales, donde serán un hueso duro de roer debido a su ya amplia experiencia en este tipo de instancias, aunque les toque salir de la comodidad de Arrowhead en algún punto del camino hacia el Vince Lombardi.
Con tres derrotas en sus cinco partidos más recientes se han elevado ciertas dudas alrededor del actual monarca de la NFL, pero tienen la gran ventaja de recobrar la confianza con dos de sus últimos tres compromisos en el GEHA Field y eso comienza precisamente este lunes cuando reciban a Las Vegas (6-8), conjunto al que ya vencieron semanas atrás en calidad de visitantes con un cómodo 31-17.
El equipo que comanda Antonio Pierce, tras terminar abruptamente el proceso de Josh McDaniels, viene de una de las mejores presentaciones de su historia cuando apalearon (63-21) a otro rival divisional, Los Angeles C., lo que derivó en la salida de Brandon Staley como entrenador en jefe de la franquicia californiana.
La ofensiva negro y plata pasó en tan sólo una semana de ser blanqueado por Minnesota (3-0) en casa a conseguir la mayor cantidad de puntos en un partido (63) en la historia de la franquicia, por lo que será interesante ver qué tipo de ofensiva en Kansas City.
En la primera cita, Patrick Mahomes y compañía se repusieron de una desventaja de 14 puntos para salir con la victoria de Las Vegas, pero fue la defensiva quien dio un paso al frente en aquella ocasión ya que, en la segunda mitad, limitaron a Aidan O’Connell y compañía en la segunda mitad del compromiso a sólo un gol de campo.
Kansas City (-10) es amplio favorito para quedarse con la victoria y, pese a un juego de 63 unidades, luce complicado que Las Vegas pueda siquiera darle batalla a los actuales campeones, quienes quieren dar un golpe de autoridad rumbo a los playoffs ya que una victoria los convierte en monarcas del Oeste de la Americana sin ayuda de otras franquicias.